jueves, 17 de septiembre de 2009

Egocentrismo

¿Habeis tenido alguna vez complejo del Show de Truman? ¿La sensación de que eres el protagonista de un programa de televisión, observado y espiado por centenares de cámaras escondidas en los lugares más insospechados?

Este complejo, reservado para egocéntricos, despierta una reflexión cuando se presenta. Lo primero es peinarse e intentar ofrecer la mejor cara para los millones de espectadores que miran nuestra aburrida vida porque no tienen nada mejor que hacer.

Después viene la duda sobre toda nuestra vida, y por si todo lo que ha pasado no es más que fruto del director del programa, que dirige nuestra vida cual Dios renegando del libre albedrío.

Intentamos ver lo positivo y nos preguntamos cuantos millones de fans nos deben ver a través de la televisión, totalmente enamorados de nosotros y deseando poder abalanzarse sobre nosotros cualquier día.

Volvemos a la parte negativa con la vergüenza, al darnos cuenta de que no hay momento para la privacidad. Todos lo han visto todo. Cuando me dio por robar, las borracheras, masturbaciones, mentiras y putadas a todas las personas que conozco.

Por último viene la resignación. Es demasiado tarde para cambiarlo. Y si han visto todo lo que he hecho durante mi vida, y aún así me siguen, ¿para qué voy a cambiar?

Te despeinas y das tu peor perfil, cosa imposible porque las cámaras te graban desde todos los ángulos posibles, y sigues viviendo tu vida de la peor manera posible, pensando en el momento en el que tus abuelos bajarán la cabeza avergonzados cuando mueras y te des cuenta de que hay muchos más espectadores que los terrestres. Eso para los creyentes, obviamente.

Si escribes, no conduzcas.
Hobbes

2 comentarios:

  1. La televisión es veneno. Lo digo literal y figuradamente.

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  2. Pide que te paguen los derechos de imagen en función de la audiencia que tengas.
    Por cierto... esta noche he soñado con funciones que tendian a "+(signo de infinito)

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